El municipio, obligado por un primer fallo judicial a abonar una suma millonaria por una rifa fraudulenta de 1995, todavía no pagó ya que el caso está en la Corte Suprema de la Nación.

El problema se inició cuando dos mujeres ganaron de una rifa impulsada por tres escuelas rurales de Chascomús. El premio: un campo de 327 hectáreas, que finalmente nunca pudieron escriturar. De este modo, iniciaron un litigio.

El primer fallo de la Justicia ordenó a los colegios, a la Provincia de Buenos Aires (responsable del Consejo Escolar) y a la empresa propietaria del campo a escriturar el terreno, pero además condenó a Chascomús a pagar cerca de 100 millones de pesos por el lucro cesante, daños y perjuicios. Como el monto implicaría la quiebra del municipio, el gobierno local presentó un recurso ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

“La presentación se realizó inmediatamente después de que la Justicia falló en primera instancia contra el municipio”, recordó hoy Ricardo Carugatti en 99.9 Radio Noticias Web.

“El fallo de la Justicia está apelado en la Corte Suprema de la Nación y entonces aún no hay ningún tipo de sanción que deba cumplir la municipalidad. Todavía no debe pagar absolutamente nada”, agregó.

Carugatti también hizo referencia a la postura actual del gobierno de Chascomús: “El secretario de Gobierno dijo que esto no solamente debería afectar al municipio de Chascomús, sino también a la Provincia de Buenos Aires porque la rifa había sido organizada por varias cooperadoras rurales que dependen de la Dirección General de Escuelas”.

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