La capilla Stella Maris, por segunda vez en el año, fue víctima de un hecho delictivo. Las autoridades continúan la investigación, pero el copón de bronce aún no aparece.

Llovía, era un día de semana, había poca gente en la calle… En ese marco, alguien (o más de uno) violentó el Sagrario de la capilla Stella Maris de San Bernardo (situada en Falkner y avenida Mitre), generó daños materiales y sustrajo parte de las cosas que había en el lugar.

El Padre Daniel Chavarrito, quien no dudó en hacer la denuncia ante la Policía apenas advirtió lo ocurrido, trató de recordar, analizar y reconstruir las actividades del pasado lunes y concluyó en que hay un margen amplio en el que pudo haber ocurrido el robo, que va desde las 12 del mediodía hasta las 18.30 horas aproximadamente.

Ese día, recordó el sacerdote frente a las cámaras de TVC5, todo transcurría con normalidad, pero un “fuerte olor a pucho” le llamó la atención y, al prender las luces, el ataque quedó al descubierto.

“El sagrario había sido violentado, estaba doblado y de costado. Cuando me acerco veo que, del interior, se habían llevado el mismo copón que sustrajeron en febrero y una custodia pequeña que queda siempre adentro del sagrario”, narró Chavarrito.

Tras comunicarse por vía telefónica con el comisario de San Bernardo, un móvil se acercó a la parroquia junto a un grupo de la Policía Científica, quienes trabajaron en el lugar en busca de indicios que permitieran recuperar los objetos robados. Una vez completada esa instancia, el sacerdote se trasladó a la comisaría para asentar la denuncia.

“Por las botellas de vino y gaseosa que aparecieron, creo que pudo haber sido alguien que robó para conseguir plata para tomar alcohol o drogas. Otra mirada no le puedo dar, me da la impresión que es muy similar a lo de febrero”, indicó el Padre Daniel haciendo alusión al episodio anterior, que se esclareció cuando efectivos policiales encontraron cerca de la capilla a un “borracho tomando cerveza en el copón”.

Lamentablemente, esta vez no se pudo arribar al mismo final y, por esa razón, la investigación continúa por estas horas a fin de resolver el robo y dar con el paradero del responsable.

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